Antonio Bejarano vistiendo a Ntra. Sra. de los Dolores de San José Obrero (Sevilla)
En esta época de precuaresma, donde las Hermandades
empiezan a organizar lo que será su exposición pública más importante del año,
también es tiempo de contar con las personas de voluntad abnegada y
conocimientos infinitos que toda Cofradía debería tener. Este es el equipo de
Priostía, personas que ponen su tiempo, su ilusión y su trabajo al servicio de
los demás hermanos, sin esperar nada a cambio, sino mas bien una crítica en
ocasiones desmedida y en otras justificada. En cualquier caso, el éxito de
cualquier cofradía en su vida publica y privada, en el culto interno y en la
estación de penitencia, depende de ellos, y está claro que en Don Benito hay
mucho que aprender todavía. A la falta de conocimientos cofrades, hay que añadirle
en ocasiones la de medios, la de ilusión, la del apoyo moral, etc…
Es tiempo de cambiar todo ello ahora que nos quedan
unas semanas hasta el miércoles de ceniza. La larga lista de trabajos en este
tiempo próximo a la Semana Santa, ocupan la mayoría de su tiempo...
Rostros con ojeras y manos encallecidas, es lo que le espera a la figura del prioste, artífice sin duda del esplendor estético de los pasos en la calle. Un trabajo ajeno a protagonismos, callado e íntimo. Aunque su labor es la más física entre los cargos de Juntas de Gobierno, y dura todo el año, la semana más dura es en la que ahora nos encontramos. Un mar de cera buscando la verticalidad más absoluta en la extensa candelería de un paso de palio, la limpieza extrema y cuidadosa de los diferentes enseres, acondicionamiento de las insignias, elecciones de exornos florales, y un sin fin de funciones.
Cuidar al máximo cada detalle, no es tarea fácil y
en pocas ocasiones se valora el trabajo callado y amoroso que facilita que el
devoto se acerque a la imagen.
Los que ostentan estos cargos, son limitados en
número y nada sería posible sin la ayuda y la colaboración de los hermanos, es
importantísimo abrir las puertas de ese pequeño mundo en donde te ensucias la
ropa de limpiaplata, acudes a casa colmada de cera, pasas el frío más horrible
que recuerdes y a la vez te satisfaga interiormente más que nada, ver el
trabajo bien hecho para el disfrute de todos los granadinos.
La Priostía es quizás de las partes de las juntas
de gobierno de las Hermandades menos conocidas y reconocidas, en cambio gracias
a su labor, en multitud de ocasiones los cultos de las hermandades se
convierten en verdaderos monumentos al buen gusto.
Cuando hablamos de cultos de Reglas, refiriéndonos
a triduos, novenas, besamanos, quinarios, etc, no sólo se tiene en cuenta lo
que es la parte en si de los rezos, de vital importancia es la ardua labor de
la priostía por engalanar los altares para dichas conmemoraciones, llegando a
ser en algunos casos, noticia en la prensa. De igual manera, de ellos depende
el montaje de los pasos procesionales y sus característicos conjuntos.
Porque estos conjuntos abarcan desde la orfebrería,
el exorno floral y las telas que representarán el pasaje bíblico de la Pasión,
Muerte y Resurrección de Jesucristo o a su Madre, ya sea expresando su dolor o
en gloriosa alegría.
De ellos depende la limpieza de los enseres, con
extremo cuidado para salvaguardar el patrimonio y utilizando todos los medios
para garantizar su correcta manipulación. Para esto, el equipo de priostía
también cuenta llegada la Cuaresma, con los hermanos que conforman los grupos
jóvenes, que les ayudan en la limpieza de los enseres.
La Priostía también se encarga de
mantener el conjunto de bordados y piezas de tela, así como le perfecto estado
de conservación de las piezas en madera tallada y dorada. En conjunción con la
priostía, están las labores de los vestidores, que en su labor conjunta dan la
magnitud antes referidas a estos altares efímeros que se conforman en los
cultos anuales y en la Semana Santa.
El Prioste, sin duda el cargo de Junta de Gobierno
que más trabaja físicamente en la Hermandad.
Cada Hermandad tiene establecido en sus
Reglas el número de Priostes que conforman la junta de gobierno y sus
funciones: decidir como poner los altares, los cultos, las imágenes, las
flores, fundir la cera, la ropa, las insignias,………
¿Días de trabajo? TODOS. Cada Hermandad tiene sus
propios cultos, aunque posiblemente el caso de mi Hermandad sea el extremo. Por
ejemplo, una Hermandad como la de Las Siete Palabras en Sevilla, no tiene meses
de vacaciones, a mediados de Agosto empieza el curso pensando en el mes de
Octubre: Velá, Triduo y Salida de la Virgen del Rosario, Triduo Sacramental y
el Cabildo General. En Julio aun se están recogiendo y limpiando las insignias
y enseres utilizados para el Corpus de Sevilla y el de San Vicente, con lo cual
la Priostía trabaja todo el año.
El intentar decir un número exacto de días que hemos ido a trabajar es imposible, no tengo un Diario, pero sí puedo enumeraros los días de Culto y así podéis hacer las cuentas (Vestir imágenes, montar culto, fundir la cera, desmontar culto, limpiar los enseres,……) En el curso 2007-08, la Hermandad de Las Siete Palabras tuvo un Quinario, cuatro Triduos, tres Funciones, tres Misas de Difuntos oficiales, Salida Procesional de la Virgen del Rosario, la del Miércoles Santo y el Corpus de San Vicente; además hay que sumar tres Besamanos, un besapiés y el Altar del Corpus de Sevilla. Vestir a las imágenes en correspondencia a la fecha en que estamos. Y no tendremos en cuenta la Velá de la Virgen del Rosario, Conciertos de Música, Belén de la Hermandad, Pregones, Retiros, Conferencias,…….y todos los demás actos que la Hermandad realiza durante el año y que no están dentro de las Reglas de la Hermandad.
No hay dinero suficiente
dentro de una Hermandad, para pagar la mano de Obra que conlleva el trabajo de
una Priostía y eso que los Priostes pagamos la cuota anual y la Papeleta de
Sitio. Una Priostía está formada además de los Priostes por los auxiliares de
Priostía, los diferentes Hermanos que se pasan habitualmente, hermanos que se
pasan muy de vez en cuando, y otras personas que ayudan en esta labor. Eso sí,
posiblemente, también sea el cargo de Junta de Gobierno, donde las felicitaciones
o críticas se dan en el acto y donde la autoestima se eleva tras terminar un
montaje o tras la opinión de las personas que van a ver el culto. Además se une
el privilegio de salir cerca de nuestros Sagrados Titulares en la magnifica
noche de un Miércoles o Jueves Santo, disfrutando delante de ellos y por si
ocurriese algo inesperado, ponerle remedio rápidamente: que se suelte la
corona, se caiga una potencia (en esto ya tengo experiencia), que se caiga o
mueva una vela…
Como podéis ver, el cargo de Prioste tiene sus pros y sus contras (como todos) pero si os digo que no cambio los momentos vividos en la Hermandad con mis Hermanos en Cristo por todo el oro del mundo (y eso que estamos en crisis) tanto trabajando en los montajes-desmontajes, como trasladando a nuestros Sagrados Titulares, limpiando los enseres, montando los pasos o reponiendo fuerzas con sus tertulias.
El Prioste primero de la Cofradía tiene encomendada
las siguientes funciones o atribuciones:
• Organizar los cultos, designando celebrantes,
predicadores y personal auxiliar, eligiendo su vestuario, y disponiendo el
montaje y exorno de los altares.
• Dirigir el montaje y desmontaje de los pasos procesionales, vigilando que el traslado de las imágenes se haga con el máximo respeto y cuidado.
• Acondicionar las insignias de la Cofradía para la Estación de Penitencia.
• Cuidar de la conservación y limpieza de la Iglesia y casa, de los altares, cuadros, vestiduras de imágenes y ornamentos, candelería y en general de todos los enseres destinados al culto, procurando que no falte en los altares el debido ornato de cera y flores.
• Dirigir el montaje y desmontaje de los pasos procesionales, vigilando que el traslado de las imágenes se haga con el máximo respeto y cuidado.
• Acondicionar las insignias de la Cofradía para la Estación de Penitencia.
• Cuidar de la conservación y limpieza de la Iglesia y casa, de los altares, cuadros, vestiduras de imágenes y ornamentos, candelería y en general de todos los enseres destinados al culto, procurando que no falte en los altares el debido ornato de cera y flores.
El Prioste primero podrá auxiliarse, para
cualquiera de sus funciones, del Prioste segundo. Además, el Prioste segundo
sustituirá al primero con sus mismos derechos y obligaciones en caso de baja,
ausencia o enfermedad duraderas, imposibilidad, incapacidad, renuncia o cese.
La mayoría de Hermandades cuentan con
uno o dos Priostes, que montan, desmontan y cuidan todos los aspectos de
decoración y cuidado de las imágenes y andas. Para vestir las imágenes, en
ocasiones, son ellos quienes nombran a Camareros, que arropan las
esculturas cristíferas y Camareras, que visten las efigies Marianas.
MODELO DE ARTICULADO EN LAS REGLAS
Bajo la dirección del Prioste Primero, los Priostes
tendrán como misión especifica la conservación y ornato de nuestros Sagrados
Titulares, así como la de todos los bienes y enseres de la Corporación,
por los que velarán y tendrán dispuestos para las fechas oportunas.
Cuidarán del exorno de las capillas, teniendo
también a su cargo la conservación, limpieza y organización de las mismas; de
los ornamentos; vestiduras de la Santísima Virgen; candelería; insignias y, en
general, de todas las dependencias y elementos propios de la Corporación.
Dirigirán el montaje y desmontaje del Monumento al
Santísimo del Jueves Santo, Paso procesional y altares extraordinarios de
cultos. Acondicionaran las insignias para cuando sea precisa su utilización en
los cultos y procesiones; y tendrán a su cargo la cera de la Hermandad, de la
que serán responsables.
Serán integrantes de la Comisión Sacramental de
Cultos, colaborando con el Promotor Sacramental en cuanto se refiere a la
organización de todos los cultos de la Hermandad, tanto internos como externos.
En la Cofradía, portarán cirio negro, ocupando el Prioste primero lugar próximo al Paso y el segundo delante de la Presidencia.
Como reflexión final, solamante señalar que a nivel local, en Don Benito, no estaría de mas seguir añadiendo algo de formación y cultura cofrade, para evitar el mal uso del patrimonio, el escaso gusto en el vestido de las imagenes marianas, cuando las hermandades confían en quienes no deben, movidas por ataduras y favores innecesarios, y que denotan todo lo que nos queda por recorrer. Se articulan ornamentaciones que no tienen que ver con el gusto tradicional, a capricho de una mezcla de estilos dificilmente entendibles que a la vista de las personas que ignoran el mundo cofrade parecen vistosos y no dejan de hacer daño a la vista...
Por todo ello, bien haríamos en pertrecharnos de un buen equipo de personas preparadas dispuestas a trabajar sin cobrar nada a cambio, a diferencia de lo que sucede ahora. ¿Qué mejor recompensa que el trabajo bien hecho?, ¿qué mejor pago que una oración ante nuestros titulares agradeciendo el haber podido vestirlos o limpiarlos mirándolos a los ojos? ....
... Mas vale un buen Prioste que ...