Queridos lectores, os traigo hoy un buen libro para empezar el año, de nuestra editorial de referencia Jirones de Azul: "El Niño Imaginero". Una biografía sobre el gran artista de la imaginería, Luis Álvarez Duarte, que desde su mas tierna juventud comenzó a desarrollar una incipiente carrera, que le ha llevado a ser referencia de la escultura religiosa actual, y trabajador inagotable de las cofradías.
El imaginero abre su memoria para recordar sus historias con las cofradías en el último medio siglo
El imaginero abre su memoria para recordar sus historias con las cofradías en el último medio siglo
El libro fue presentado el pasado 3 de diciembre, en la Fundación Cruzcampo en un acto presidido por el arzobispo de Sevilla, D. Emilio Gómez Piñol y Joaquín Delgado-Roig
El Niño Imaginero, subtitulado Medio siglo de
cofradías con Álvarez Duarte, es una biografía y a la vez unas memorias del
popular imaginero, un libro escrito por el periodista José Joaquín León,
precisamente cuando se cumplen los 50 años de la Virgen de los Dolores de San
José Obrero, primera obra de Luis Álvarez Duarte, que la talló cuando tenía
sólo 12 años.
El libro, publicado por Jirones de Azul, será presentado el lunes 3 de diciembre, a las 20.30 horas, en el salón de actos de la Fundación Cruzcampo. En este acto de presentación intervendrán el arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo Pelegrina; el cofrade Joaquín Delgado-Roig Pazos, ex hermano mayor del Silencio y mayordomo de Las Aguas cuando fue bendecida la Virgen de Guadalupe; y el profesor Emilio Gómez Piñol, catedrático emérito de Historia del Arte Hispanoamericano de la Universidad de Sevilla y académico de la Real de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría.
EL LIBRO
Autor: José Joaquín León
Editorial: Jirones de Azul
Año: 2012
Género: Divulgación
ISBN: 978-84-940762-0-6
470 páginas con 180 fotografías
Este libro es una biografía del Niño Imaginero al cumplirse 50 años desde que
talló su primera Virgen. Pero es también medio siglo de cofradías con Luis
Álvarez Duarte. Es el fruto de muchas horas de conversación entre el artista y
el periodista José Joaquín León. De ahí ha salido un libro que se narra en
primera persona, y que no sólo repasa la vida y la obra de quien está
considerado como el mejor imaginero religioso vivo, sino que recorre infinidad
de historias y anécdotas de las cofradías en el último medio siglo. Se
complementa con 180 fotografías.
Como explica el autor, José Joaquín León, “El Niño Imaginero no trata sólo de la vida y la memoria de Luis Álvarez Duarte, sino de muchas historias cofradieras. Y no sólo de Sevilla, sino también de Málaga, de Cádiz, de Jerez, de Huelva, de Córdoba, de Almería, de Granada, de Jaén, de toda Andalucía, de más de media España y de buena parte de América. A mí mismo, que he escrito las historias, me da cierto respeto de tantas como he metido, porque te ponías a contar una y salía otra, y después alguna más; y al final todo se hacía de historias, de nombres y de anécdotas, que certificaban el mucho capillismo de Luis, que ha estado presente en casi todo lo gordo que ha pasado. Es mucho lo que le ha aportado a la Semana Santa del mundo mundial, no sólo de Sevilla.”
El imaginero abre su memoria, y recuerda con pelos y señales, sus obras de creación y sus restauraciones, abordando no sólo los éxitos, sino aclarando también algunos asuntos que levantaron polémicas y las casi siempre difíciles relaciones entre los restauradores que son imagineros y los que no lo son.
Estamos ante un libro que será referencia imprescindible para los aficionados al arte y a la historia de las cofradías, pero que también atraerá a todos los cofrades y personas interesadas por la Semana Santa. Aquí están los grandes momentos de Álvarez Duarte omo imaginero y asimismo como restaurador de imágenes tan populares como la Esperanza de Triana y el Gran Poder. En este libro aparecen muchos cofrades del último medio siglo. Es la vida y la obra del niño imaginero, aquel chaval que hacía virgencitas, que un día tuvo un sueño y lo convirtió en la Virgen de Guadalupe.
EL IMAGINERO
Luis Álvarez Duarte (Sevilla, 1949) se dio a conocer en 1962 como un niño
prodigio de la imaginería, al tallar con sólo 12 años la Virgen de los Dolores,
de San José Obrero. Se hizo famoso con la Virgen de Guadalupe, que empezó
cuando tenía 15 años y terminó a los 16. En 1970 talló el Cristo de la Sed, su
primer Crucificado. La consagración le llegó en 1973 con la Virgen del
Patrocinio, de la hermandad del Cachorro.
Hoy se le considera el mayor exponente vivo de la imaginería religiosa en Andalucía. Sus imágenes están presentes en las ocho capitales y las ocho provincias andaluzas, y en 12 comunidades autónomas españolas. En América tiene tallas muy conocidas como la Macarena de Nueva York o el Cristo de la Catedral de Buenos Aires.
Su obra profana está repartida por toda España y diversos países de Europa y América. Ha trabajado para la Familia Real. Asimismo es autor de cuatro monumentos en Sevilla y uno en Málaga. El Ayuntamiento de Sevilla le ha dedicado la calle Imaginero Luis Álvarez Duarte, en el lugar donde residió en su infancia, en San José Obrero.
Entre sus numerosas restauraciones, destacan las realizadas a imágenes tan populares como la Esperanza de Triana y Jesús del Gran Poder, en Sevilla; y la Esperanza del Perchel, en Málaga. Es académico de la Real Academia de Bellas Artes Santa Isabel de Hungría.
EL AUTOR
José Joaquín León (Cádiz, 1955), licenciado en Periodismo por la Universidad Complutense, es articulista de Diario de Sevilla y los diarios del Grupo Joly, así como miembro del Consejo Editorial del Grupo Joly, del que fue director de Publicaciones. También ha sido director de Diario de Cádiz. Anteriormente, entre 1978 y 1998 trabajó en ABC de Sevilla, donde fue subdirector. Entre los galardones que ha recibido, destacan el Premio Andalucía de Periodismo 2010 y el Premio Ciudad de Cádiz de Periodismo.
Mantiene una amplia vinculación con las cofradías, tanto profesional como personal. Su popular columna La Campana ha cumplido ya 28 años. Se publicó en ABC desde 1984 a 1998 y en Diario de Sevilla desde 1998 hasta ahora.
Es autor del libro Guía de la Semana Santa de Sevilla y ha sido coautor en La Semana Santa de Sevilla, paso a paso y en Historia de las cofradías sevillanas, todos ellos en coleccionables de ABC. También es autor de El Santo Entierro Grande (Castillejo, 1992). Coordinó el libro Santa Ángela de la Cruz, editado por Diario de Sevilla.
El arzobispo de Sevilla, Juan José Asenjo Pelegrina, fue el encargado de presidir la presentación de este libro, junto al presidente de la Fundación Cruzcampo, Julio Cuesta; el profesor emérito de Historia del Arte de la Universidad de Sevilla, Emilio Gómez Piñol; y las editoras de Jirones de Azul, Rosa y Esperanza García Perea. No pudo estar presente, como estaba previsto, Joaquín Delgado-Roig, quien fuera mayordomo de la Hermandad de las Aguas cuando Álvarez Duarte talló, con 16 años, la Virgen de Guadalupe. Julio Cuesta, destacó en su introducción que esta publicación será esencial en la historia de la religiosidad popular: "Más que un libro es un homenaje a un personaje clave".
Emilio Gómez Piñol fue el encargado de presentar al homenajeado desde su faceta artística. Relató la relación que le une a Luis Álvarez Duarte desde que formaron parte de las comisiones de expertos de las dos restauraciones efectuadas por los Cruz Solís al Señor del Gran Poder (1983 y 2006). "Se podría decir que la trayectoria de Luis es legendaria: un niño prodigio que es capaz de dar forma al barro primero y luego traspasarlo a la madera". "La representación de la Dolorosa niña tiene en Álvarez Duarte a su más destacado autor", acertó a decir. Gómez Piñol también tuvo palabras de elogio para el autor del texto, José Joaquín León, y afirmó que "el libro es una buena fuente para conocer la relación entre el artista y los comitentes (personas que encargan las obras)".
La publicación surgió, como explicó José Joaquín León, de una entrevista que le hizo al artista para la contraportada de Diario de Sevilla la pasada cuaresma. "Comprobé que Luis necesitaba un libro. Y ha salido después de muchas charlas, en días en los que Luis le dedicó menos tiempo a la gubia y más a los recuerdos". El autor explicó que el libro podría parecer un poco "raro", aunque también "interesante". "De tantas horas de charla ha salido esto, que es suyo, aunque también es mío, en el sentido de que hay algunas cosas que no me las contó él, sino que me las he buscado yo (aunque no me las haya inventado) y así le hemos puesto algunas guindas al pastel, pero como si lo cocinara él".
El libro recoge aspectos desconocidos de la vida de Álvarez Duarte para el gran público, como cuando, con 25 años, trabajó en Madrid. "Cuando tenía todo ganado como escultor, cuando se podía poner el mundo del arte por montera, se volvió a Sevilla. ¿Por qué? Para ser lo que quería ser: imaginero". El niño imaginero también retrata al cofrade que Álvarez Duarte lleva dentro, "un capillita como la copa de un pino flandes", que ha vivido infinidad de anécdotas, que ha restaurado algunas de las imágenes más importantes de la Semana Santa, que es autor de tallas muy importantes, no sólo en Sevilla, sino en toda Andalucía, en España, e incluso en América, como la Macarena de Nueva York o el Cristo de los Futbolistas de Buenos Aires. José Joaquín León reclamó para Álvarez Duarte "la más que merecida" Medalla de Andalucía.
Monseñor Asenjo también destacó que Álvarez Duarte "quiso ser imaginero, habiendo podido ser sólo un escultor notable". Asenjo destacó sus cualidades y la piedad y conversión que suscitan sus obras: "Efectivamente, sus imágenes de nuestro Señor y de su Madre bendita, son un prodigio de belleza, de perfección formal, pero también de unción religiosa, capaces de interpelar, de mover los corazones y de remover los rescoldos de una fe mortecina o vacilante". El arzobispo elogió también al autor, José Joaquín León, del que dijo que "ha escrito una obra preciosa, con una prosa limpia y vigorosa, ágil y de fácil lectura, a caballo entre la crónica periodística y la pura investigación rigurosa y concienzuda".
El imaginero, muy emocionado, agradeció el cariño y resumió: "Ésta es mi fe, mi pasión y mi vida".
