Me interesa exponer a continuación una lectura del Evangelio según San Marcos, para luego explicar qué sentido tiene ponerlo en este Blog:
Marcos 10,2-16
En aquel tiempo, 2 se acercaron unos fariseos y le preguntaron a Jesús para ponerlo a prueba:
- ¿Le es lícito a un hombre divorciarse de su mujer?
3 Él les replicó:
- ¿Qué os ha mandado Moisés?
4 Contestaron:
- Moisés permitió divorciarse dándole a la mujer un acta de repudio.
5 Jesús les dijo:
- Por vuestra terquedad dejó escrito Moisés este precepto. 6 Al principio de la creación, Dios los creó hombre y mujer. 7 Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer 8 y serán los dos una sola carne. De modo que ya no son dos, sino una sola carne. 9Lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre.
10 En casa, los discípulos volvieron a preguntarle sobre lo mismo. 11 Él les dijo:
- Si uno se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra la primera. 12 Y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio.
13 Le presentaron unos niños para que los tocara, pero los discípulos les regañaban.
14 Al verlo, Jesús se enfadó y les dijo:
- Dejad que los niños se acerquen a mí: no se lo impidáis; de los que son como ellos es el Reino de Dios. 15 Os aseguro que el que no acepte el Reino de Dios como un niño, no entrará en él.
16 Y los abrazaba y los bendecía imponiéndoles las manos.
Para la creación de un Cofrade, hay que beber desde pequeño, las fuentes que alimentan el espíritu del mismo, el ejemplo de sus padres, hermanos y el resto de familia cercana, amigos, etc… Esa túnica que cuelga del armario, esperando ser parte de la herencia familiar, de las tradiciones que constituyen seña de identidad y catequesis permanente del niño, que mira con ilusión y ansiedad el momento de ponérsela.
Mas allá de entender que la formación en la Escuela de nuestros pequeños hoy en día, es totalmente laica, salvo el tipo de Colegio, al que eventualmente, pudiéramos llevar a nuestros hijos, y que son regentados por alguna congregación religiosa; para la raíz de un futuro cofrade es necesario “predicar con el ejemplo”, inscribiendo a nuestro pequeño/a, a la Corporación a la que pertenezcamos, para que poco a poco, año a año, nos acompañe en nuestra Estación de Penitencia, o vaya asumiendo alguna posición en la composición del cortejo.
Al margen de ello, las Hermandades y Cofradías, deben incidir en la formación cofrade desde la época de Catequesis pre y post comunión, también en la preparación de la Confirmación, en las Escuelas de Padres, etc.., en colaboración con la Parroquia correspondiente; pudiendo también llevar a cabo charlas o conferencias en los Colegios, no solo sobre el ya necesario espíritu cofrade, si no también, sobre la cultura que implican las obras de Arte y su Historia, en el seno del patrimonio cofrade, para que se vayan familiarizando con estas cuestiones.
Como podéis comprobar, la labor que resta por hacer de nuestras corporaciones, es muy completa, y se ha de extender mas allá de la propia Semana Santa.
Que así sea…
Marcos 10,2-16
En aquel tiempo, 2 se acercaron unos fariseos y le preguntaron a Jesús para ponerlo a prueba:
- ¿Le es lícito a un hombre divorciarse de su mujer?
3 Él les replicó:
- ¿Qué os ha mandado Moisés?
4 Contestaron:
- Moisés permitió divorciarse dándole a la mujer un acta de repudio.
5 Jesús les dijo:
- Por vuestra terquedad dejó escrito Moisés este precepto. 6 Al principio de la creación, Dios los creó hombre y mujer. 7 Por eso abandonará el hombre a su padre y a su madre, se unirá a su mujer 8 y serán los dos una sola carne. De modo que ya no son dos, sino una sola carne. 9Lo que Dios ha unido que no lo separe el hombre.
10 En casa, los discípulos volvieron a preguntarle sobre lo mismo. 11 Él les dijo:
- Si uno se divorcia de su mujer y se casa con otra, comete adulterio contra la primera. 12 Y si ella se divorcia de su marido y se casa con otro, comete adulterio.
13 Le presentaron unos niños para que los tocara, pero los discípulos les regañaban.
14 Al verlo, Jesús se enfadó y les dijo:
- Dejad que los niños se acerquen a mí: no se lo impidáis; de los que son como ellos es el Reino de Dios. 15 Os aseguro que el que no acepte el Reino de Dios como un niño, no entrará en él.
16 Y los abrazaba y los bendecía imponiéndoles las manos.
Para la creación de un Cofrade, hay que beber desde pequeño, las fuentes que alimentan el espíritu del mismo, el ejemplo de sus padres, hermanos y el resto de familia cercana, amigos, etc… Esa túnica que cuelga del armario, esperando ser parte de la herencia familiar, de las tradiciones que constituyen seña de identidad y catequesis permanente del niño, que mira con ilusión y ansiedad el momento de ponérsela.
Mas allá de entender que la formación en la Escuela de nuestros pequeños hoy en día, es totalmente laica, salvo el tipo de Colegio, al que eventualmente, pudiéramos llevar a nuestros hijos, y que son regentados por alguna congregación religiosa; para la raíz de un futuro cofrade es necesario “predicar con el ejemplo”, inscribiendo a nuestro pequeño/a, a la Corporación a la que pertenezcamos, para que poco a poco, año a año, nos acompañe en nuestra Estación de Penitencia, o vaya asumiendo alguna posición en la composición del cortejo.
Al margen de ello, las Hermandades y Cofradías, deben incidir en la formación cofrade desde la época de Catequesis pre y post comunión, también en la preparación de la Confirmación, en las Escuelas de Padres, etc.., en colaboración con la Parroquia correspondiente; pudiendo también llevar a cabo charlas o conferencias en los Colegios, no solo sobre el ya necesario espíritu cofrade, si no también, sobre la cultura que implican las obras de Arte y su Historia, en el seno del patrimonio cofrade, para que se vayan familiarizando con estas cuestiones.
Como podéis comprobar, la labor que resta por hacer de nuestras corporaciones, es muy completa, y se ha de extender mas allá de la propia Semana Santa.
Que así sea…