Es una satisfacción muy
grande pensar que las tradiciones pueden mantenerse, con un poquito de interés
e ilusión, y con un gran trabajo por parte de todos los que nos gusta llevar la
vida Cofrade allí donde podemos ser ejemplo. Si bien es cierto que en Don
Benito, es muy complicado picar el gusanillo en los más pequeños, no es menos
cierto, que en el ámbito de la actividad parroquial, los cofrades, los
catequistas y los sacerdotes, podemos ampliar nuestro campo de miras no solo a
la labor que podemos desarrollar con los adultos, sino también a esos niños y
niñas, que como espectadores de lo que hacemos, de lo que les proponemos
también pueden acercarse a la devoción, a la oración, a los cultos como una
extensión mas de nuestra labor formativa y catequizadora.
A menudo solemos ver
niños en los cortejos procesionales de nuestras Hermandades y Cofradías, bien
acompañando a sus padres en la realización de su penitencia, o bien portando
alguno de los elementos que identifican a la corporación en la calle.
Niños en el cortejo procesional de la Borriquita de Don Benito
Niños en el cortejo procesional de la Buena Muerte de Don Benito
Niños en el cortejo procesional
del Cristo de la Paz y la Soledad de Don Benito
Pero ahora ponemos el
acento a una gran iniciativa que ha tenido la Parroquia de Santa
María, con la fundación de una Hermandad exclusivamente de niños en el seno de
sus grupos de catequesis. Aglutinando esas pequeñas salidas en el entorno de la Iglesia , que las mañanas
de Domingo de Ramos, hacen la mayoría de parroquias de la ciudad; como por
ejemplo la Parroquia
de Santiago con el Pollino que da la vuelta a la Plaza de España y a cuyos
lomos va montando un niño que hace de Jesús en su entrada triunfal en
Jerusalem, escoltado por un buen número de pequeños y pequeñas, que vestidos de
hebreo y portando palmas y ramos de olivo, escenifican el momento previo a la
pasión que viviría nuestro Señor días
después.
Procesión de Palmas por la Plaza de España de Don Benito con Don Delfín,
Párroco de Santiago, en los años 70
No olvidamos tampoco
aquellos inicios de la Hermandad Parroquial
de la Borriquita ,
en aquellas luminosas mañanas de Domingo de Ramos, de finales de los ochenta,
cuando surgía como una Procesión de Niños, que vestidos con hábito blanco y
portando palmas y ramos, como acólitos,
partían desde la calle San Juan a la explanada de la cuesta de San Sebastián, cuya Parroquia
acogía una solemne misa bajo la atenta mirada de la imagen de Jesús en su
Entrada Triunfal en Jesuralem; humilde representación de nuestro Señor, de la Escuela de Arte Cristiano
de Olot, que hoy se ve postrada a la tarde oscura y solitaria de los Domingos
de Ramos, con numerosos niños en el cortejo procesional.
Imagen de la Borriquita de Don Benito,
en la explanada de San Sebastián para la portada de la Revista de 1995
El
pasado mes de febrero, en la catequesis "de primera comunión" de la Parroquia de Santa María
surgió la idea de formar una
"hermandad" de niños para participar en la procesión parroquial del
Domingo de Ramos. Para ello se han ido dando pasos:
-1º.- Han adquirido una pequeña talla de Jesús en la burrita, que llevaran
los niños en las andas que se están confeccionando.
-2º.- Los nin@s que quieren podrán hacerse sus hábito
para la procesión. El diseño está inspirado en el "Jesusito de mi vida", muy conocido
por los niños.
-3º .- El pasado domingo 23 de febrero, al finalizar la
"misa de niños", se empezó a hacer entrega de la ficha de inscripción. La Parroquia espera que
sean muchos los niños que se apunten a esta "hermandad", que realzará
nuestra multitudinaria "procesión
infantil de ramos" y será una
catequesis sobre esta celebración litúrgica y, en definitiva, una acción
evangelizadora. Procesión que se desarrollará, Dios mediante, en la luminosa mañana del Domingo de Ramos,
por el entorno de la
Parroquia sita en el Barrio de San Gregorio.
Para
apuntarse hay que rellenar la ficha y entregarla en la parroquia con 10 € para
la palma y medalla. El modelo y patrones del "hábito" están también
en la parroquia.
-4º.- El domingo
6 de abril, se bendecirá la pequeña imagen de Jesús en la burrita e impondremos a
los niños la medalla de esta "hermandad".
Gran iniciativa esta la
de Don Juan Manuel de Miguel Sánchez, Párroco de Santa María del Consuelo y Vicario de la Diócesis de Plasencia para la zona Sur; que junto con
Don Jesús, los Catequistas, y los abnegados colaboradores de la Parroquia , así como los
Padres de estos niños, tienen la ilusión de incentivar la labor catequizadora a
través de esta acción; sin mayores pretensiones que las de dar testimonio de la Fe , que los mayores con mas o
menos fortuna tratamos de inculcar a nuestros pequeños.
Este afortunado paso tuvo ya una escenificación de lo que nuestros pequeños pueden llegar a reflejar, fruto del esfuerzo de los mayores, el pasado día 2 de febrero en la Procesión de las Candelas, que tuvo lugar en el Barrio de San Gregorio, promovida por la misma Parroquia y sus catequistas. Junto a la Virgen, los niños y mayores vivieron de forma especial el día de la Presentación de Jesús en el Templo, que felizmente este año coincidió en domingo, por lo que se pudo aprovechar esta celebración de forma muy catequética.
Ese día, en la Iglesia "no cabía un alfiler"; la celebración comenzó con la bendición de las candelas y la procesión con la Virgen y el Niño alrededor de la iglesia, llevando cada niño su candela encendida.
Tras la procesión la Santa Misa en la que, como "homilía", los niños de la catequesis representaron la escena evangélica que acababa de ser proclamada con una gracia y un arte extraordinarios.
Al finalizar la Santa Misa, se soltaron los dos pichones que San José llevó al Templo y se repartieron dulces como "convite" porque Jesús ha sido presentado al Señor.
*Nota: Fotografías gentileza del Blog:
http://santamariadelconsuelo.blogspot.com.es/
REFLEXIÓN FINAL
http://santamariadelconsuelo.blogspot.com.es/
REFLEXIÓN FINAL
Por todo lo expuesto, tenemos que congratularnos de nuevo por una gran propuesta que vuelve a acercar a los mas pequeños no sólo a la actividad de la Iglesia, como extensión de la Palabra de Dios en la tierra, ("dejar que los niños se acerquen a mi"); que les hace partícipes de las tradiciones de la devoción popular, creando el poso necesario para mantenerlas y que los hace madurar como personas en la FE.
Cualquier otra interpretación que se haga de esta iniciativa, basada en una competencia entre Parroquias o entre Cofradías, está totalmente alejada de la realidad, y seguramente se hace por el miedo a perder el poco o mucho protagonismo ganado con los años, y que a veces mas por un mal hacer de las costumbres o una gran incapacidad para mantenerlas, genera un exilio de unos barrios a otros, motivado por la ilusión que se despierta en los mas pequeños de las acciones positivas que nos proponen nuestros Sacerdotes y Catequistas.
Si practicamos la envidia, el recelo, el rencor, la calumnia, la injuria, la pereza, etc... incluso cuando tenemos la responsabilidad de dar clases de religión a los más pequeños; nos estamos alejando de Dios, de su mensaje. Todos tenemos cabida en Su Casa; se tiene que dar la opción de elegir donde queremos desarrollarnos como cristianos y por qué; y de cara a nuestros pequeños debemos dar ejemplo de armonía y unidad. Unos querrán ser como los niños que acompañaron a Jesús en su entrada Triunfal en Jerusalém, y no les importará el recorrido, ni el protagonismo, ni si es de día o es de noche; ni si sus ropas son de una manera u otra; otros querrán ser como Judas, que acompañó al Señor en su entrada, como un figurante mas, y esperando su momento de "gloria", para que se cumplieran las Escrituras; pero siendo consciente de que con su actitud cobarde, mezquina, manipuladora e interesada, no estaba honrando a nuestro Señor.
Una COFRADÍA DE NIÑOS, como la que comenzaron en San Juan en los años ochenta, para sacar a la Borriquita, y que tiene su continuidad en una procesión de Palmas alrededor de la Iglesia, en la luminosa mañana del Domingo de Ramos, es lo mínimo que se debe ver en cada Parroquia, en cada barrio; y si esta se hace de forma ordenada y vistosa, con cierta uniformidad, con la responsabilidad de sacar un pequeño paso, como en las Candelas, como podría ser una Cruz de Mayo , o un Divino Niño Jesús; sólo tiene la pretensión de seguir formando y dando testimonio de nuestra FE, y para los cofrades de verdad, es una gran noticia, para poder pensar que.....